jueves, 5 de mayo de 2011

DESTINO CHUNGO, CRUEL Y CANALLA (JS)

Nefasto diescinueve que desmembraste nuestras vidas, dejándonos un muñón en el alma.  
Inocentemente buscamos en nuestras miradas un consuelo, lámiendonos las llagas que se niegan a sanar.  
Queriendo sofocar el llanto, dándole a la memoria algo más en que pensar, esperando que al siguiente día el corazón no reviente como hasta ahora cada mañana ocurre.
Qué se puede esperar, si cada cierto tiempo vendrás tú,  diescinueve, vestido de abriles o mayos o de cualquier otro y nos abofetearás enlutando nuestra realidad.
Quisiera quitarme las temibles lágrimas y el nudo angustioso de la garganta, no recordar, no sentir, deshacerme del vacío que arde en mí, contemplar a lo que vendrá con nuevos ojos, mas mis deseos se desvanecen calcinando mis momentaneas alegrias....

¿Qué huella dejamos a nuestros hijos?

  Sé que muchos no leerán la siguiente lista de enunciados y reflexiones, pero para aquellos a los que llamé su atención, les insto a que le...