lunes, 7 de noviembre de 2011

Se destiempla el hilo conductor

Cuando te tenía enterrado, olvidado, empolvado... regresaste.
Mi mente se pregunta que hacer cuando resurgen tus recuerdos en lo onírico, pero tú estás tan ausente. 
Detesto este juego de palabras y sentimientos; apuesto mi cordura a la pasión de la que me despojas. 
Cómo entregarme por completo al azar, si tengo miedo de caer abismalmente con las muñecas atadas y la boca ensangrentada, mordida por el dolor.

30-08-11

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