Quiero aprender a sentir otra vez:
la vibración sanguinea corriendo veloz y ligera por cada vena de mi ser,
el corazón queriendo escaparse, sin que encuentre estribo alguno que lo detenga,
la respiración entrecortada y armoniosa que deja a su paso el testarudo amor,
la piel erizada y las mejillas sonrojadas al sentir nombrándome a tu grave voz;
ser desconocido, que ansío llegues a cambiar mi todo y a olvidar mi nada.
Te espero, no te busco.... pero te espero.
Estarás tú también buscando mis besos fugitivos?
estarás esperando ahí, en tu ausencia mis susurros?
No demores en venir, te lo ruego;
que no debemos dejar que el tiempo pase,
que tenemos aún tantos lugares que aguardan nuestro rastro,
que tenemos aún tantos cuentos que robar al viento,
que las alegrías nos esperan amalgamadas con rencillas,
que sean las culpables de la apasionada reconciliación.
Si me escuchas en tus sueños,
si me sientes en tus pensamientos
acude presto a mis clamores y sálvame de esta infame soledad.
domingo, 17 de junio de 2012
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