No me hablas...
Frente a ti me muestro tal vez un tanto patética y ni siquiera intentas por un segundo mirarme, y te vas.
Y corro hacia ti...
Pero nada.
Nada. Pérdida de tiempo, te me escapas.
No deseas verme y lo entiendo.
Mentira. No comprendo.
No me es posible comprender porqué me arrebataste el corazón, porque te has burlado y aún sigues haciéndolo, porque me has dejado.
Y te ríes, y esa risa me penetra como dagas en la sien y te escucho aún cuando ya te has marchado.
Y me desarmo, me desintegro, me entristezco y al secar mis ojos tan solo veo tu sombra, solo tu figura desvaneciéndose.
domingo, 22 de abril de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
¿Qué huella dejamos a nuestros hijos?
Sé que muchos no leerán la siguiente lista de enunciados y reflexiones, pero para aquellos a los que llamé su atención, les insto a que le...

-
La obra de Caravaggio, su influencia en el pensamiento religioso de la época y en su propia vida. INTRODUCCIÓN Europa siglo...
-
Enclavado en el lugar denominado por Carlos I de España como Villa Imperial de Potosí, se avista imponente hasta nuestros días el Cerro Ric...
-
Hoy precisamente hoy se reúnen en sus minúsculas realidades todos esos (incluyéndome)que aseguran que hoy hace años A no nos conquistaron. ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario